A
los estudiantes de español se les hace difícil el uso del modo subjuntivo. Este
modo del verbo viene regido por determinadas estructuras bastante rígidas que
hay que aprender, aunque también se pueden razonar los usos de indicativo y
subjuntivo en algunos casos. En esta entrada vamos a dar unas pautas para que
los estudiantes de español más avanzados puedan usar los tiempos del modo
subjuntivo de forma correcta.
En
primer lugar, necesitamos aprender en qué se diferencia el modo indicativo del
modo subjuntivo. El modo indicativo se utiliza cuando se quiere expresar o
declarar lo que se piensa, lo que se sabe, lo que se opina, etc. de una forma
segura, como una verdad absoluta. Tomamos algunos ejemplos: Pedro tiene novia. Pienso que esto no es lo
correcto. Me parece que María no tiene ganas de ir al parque. Los libros dicen
que la Tierra es redonda.
El
modo subjuntivo se utiliza cuando se quiere hacer referencia a una idea
virtual, un deseo, una duda, un sentimiento, etc., es decir, algo que no es del
todo real en el momento en que se habla. Tomamos algunos ejemplos: No creo que María venga a casa esta tarde. Ojalá
estuvieras conmigo todas las noches. Si fuera a casa me metería en la cama con
un vaso de chocolate.
A
veces no resulta tan fácil aplicar la lógica cuando se habla español como
lengua extranjera. Por eso lo más habitual es aprender aquellas construcciones
que rigen un modo u otro. Comenzaremos con el modo indicativo. Este modo se utiliza cuando hablamos de una acción
o un estado que sin duda se desarrolla o se experimenta, ya sea en el presente,
en el pasado o en el futuro: Su hermano
está comiendo con sus tíos. Ayer se lo pasaron en grande. Mañana irá con sus
abuelos. A Jaime le gustaría tener un coche. También se utiliza con verbos
de pensamiento u opinión en forma afirmativa: Creo que Martín tiene frío. Opino que eso no es justo para ellos. Con
expresiones de tiempo (cuando, mientras,
hasta que, en cuanto, tan pronto como), si la acción se repite regularmente
en el tiempo o se ha producido ya, se utiliza el modo indicativo: Cuando me levanto por las mañanas desayuno
enseguida. Mientras Martina estudia su padre lee. Hugo estuvo esperándome hasta
que llegué. En cuanto me estudié el tema salí a tomar un café con Pedro.
El
modo subjuntivo, sin embargo, se
utiliza en construcciones que indican deseo o esperanza (querer que, desear que, ojalá): Quiero
que mi madre venga a verme. Deseo que se cumplan mis sueños. Ojalá aprobemos
los exámenes. También es de uso obligatorio con verbos de pensamiento u
opinión en forma negativa: No creo que se
queden estudiando toda la noche. No pensamos que beber mucho alcohol sea lo
mejor para él. Con expresiones de tiempo (cuando, mientras, hasta que, en cuanto, tan pronto como) si la
acción no se ha desarrollado todavía también se usa el subjuntivo: Cuando venga a verme le daré el regalo.
Mientras no hagas los deberes no tendrás tu merienda. Tan pronto como me llame,
saldré de casa. También se usa en oraciones subordinadas finales negativas:
Te lo he dicho para que no metas la pata.
Sus padres le compraron un libro para que
no pasara tantas horas delante del ordenador. Y por último, se usa cuando
hablamos de una persona, cosa, etc. que por el momento no conocemos pero cuyas
cualidades mencionamos con una oración de relativo: En esta empresa buscan a alguien que tenga muchas ganas de trabajar.
Para mi cumpleaños quiero un ordenador que no pese mucho.
¿Conoces
alguna regla adicional para diferenciar el uso del indicativo y del subjuntivo?